El sonido del cuartetazo comenzó en las alpargatas gringas de los pueblos del interior levantando polvareda en las primeras pistas de baile con piso de tierra ("vieja plaza Colón, en tus noches hermosas"), luego llegó otras provincias vecinas ("Abre, Abre tu paraguas, que comienza ya a llover"), para terminar en los clubes barriales de esta cuidad ("que te come, que te come, que te come el lobizón),
transformandose asi en el ritual nocturno de la alegría ("sueeenan las sirenas, llegaron los bomberos") de los sectores más humildes ("cortate el pelo, cabezón")
y poco a poco fue conquistando las distintas clases sociales hasta hacer juntos el trencito de la fiesta haciendo chi-qui-chá"), y sonar como bandera cordobesa hacia todo el país ("quieeen se ha tomado todo el vino oh-oh).
En1943, la historia cuartetera se m,etía en la mano izquierda de una mujer. Sobre las teclas del piano Leonor Marzano marcaba el ritmo que después haría bailar hasta los postes. Su Padre Augusto Marzano, decidió acabar con milongas y tangos y, para que no siguiera quedándose sola de noche, la integró al conjunto donde él tocaría el contrabajo, junto al acordeonista Miguel gelfoy al violinista Luis Cabero.
El grupo se llamaría igual que como le decían a ella y nació el "Cuarteto Característico Leo".
Tinglados con piso de tierra y rodeados con bolsas de arpillera fueron algunos de los primeros escenarios donde "la leo" _así le decían al grupo_ empezó su andar. Su bautismo de fuego había sido el 4 de junio de 1943, en vivo actuando en radio LV3 –hoy Cadena 3- Sin ningún disco después) hicieron bailar a pueblos enteros en el interior cordobés y en provincias cercanas.
El primer disco llegaría diez años depués.
Las preguntas surgieron junto con el crecimiento del cuarteto, porque se llama así, porque son cuatro los que la ejecutan? ¿Hubo algún cambio en lo musical?
Lo real es que cuando "la Leo" tocaba en las radios, muchos sólo iban a ver a Leonor marcar el tunga-tunga: contrariando dos convenciones, ella daba prioridad a una fuerte marcación rítmica con su mano izquierda (por sobre la melodía y la armonia que los demás pianistas y géneros musicales privilegiaban) y en vez de acentuar el segundo tiempo del ritmo, acentuaba el primero (subrayo el "tun" y suavizó el "ga"). EL cambio fue fundamental para abrir el camino del impacto bailable.
Luego de muchos años tocando por el interior "la Leo" comenzó a acercarse a esta cuidad y se hacía escuchar en los carnavales de los barrios y de ver nacerotros grupos de su inconfundible estilo musical
En la década siguiente y con la televisión como importante difusor el fenómeno cuarteto se hizo masivo y trascendió Córdoba, con presentaciones de distintos conjuntos en diferentes localidades, se fueron gestando las vivencias de este nuevo ritmo que cambiaba los limites de la música bailable conocida. Ninguna otra Música sona ni se bailaba igual.
Nacia tambien un ritual único y, con ligeras variantes. instituía el chopirán (sándwich de pan francés con chorizo de cerdo que se comía en la puerta o a la salida de los bailes.
Vino tinto , la entrada barata, policías celosos del orden, las mesas dispuestas alrededor de la pista del club y parejas girando en un solo círculo con sentido contrario a las agujas del reloj, que no partaban de bailaa hasta marcar el amanecer.
El grupo tocaba varias horas agregando su variante pero respetando el tunga-tunga.
Ninguna música habló tanto de los cordobeses como el cuarteto, con su letras pobladas de negrazones, humor casero, trasnochados, flacas alegres y desgracias del cariño.
El ritmo del cuarteto nació de la mano del Cuarteto Leo, mantuvo su vigencia gracias a Carlitos “Mona” Jiménez y se inmortalizó en la figura del “Potro” Rodrigo,llegando a la actualidad a traspasar las fronteras de la Argentina,
La música de cuarteto comienza asi, después de largos sesenta años de historia, a posicionarse entre los grandes ritmos hispanoamericanos del mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario