El ex Nochero fué la figura más convocante de la 51ª edición de Cosquín. Abrió una velada que mostró la Plaza Próspero Molina repleta.
Alma de festival
En la novena y penúltima luna fue alma de festival, por que era su anual encuentro con el público màs avido de folklore de calidad, que ve en el una gran exponente.
Es que esta noche tenía nombre propio. Con entradas agotadas, en una noche cálida, era la noche de.... Jorge Rojas , quien reafirmaba ser el artista de mayor poder de convocatoria de esta edición del Festival de Folklore de Cosquín.
La fiesta fue completa, con un público que a la noche consagró a su ídolo desde muy temprano, con interminables colas , esperaron para ingresar a la plaza Próspero Molina.
Muchas jovencitas esperaban en la puerta de artistas, cámara y birome en mano,en búsqueda de un autografo y en el escenario Atahualpa Yupanqui la previa acompañaba el lento y ordenado ingreso con Los Nova, La Callejera y Nando el Salteño, entre otros.
A las 22.30, a la hora en que cambian los precios en los quioscos de la ciudad, el rito inicial y la arenga de Marcelo Simón –hablaba de los pueblos originarios– aumentó la expectativa que se disolvió en un estruendoso recibimiento,del esperadso cantor.
La pantalla gigante del escenario mostraba a Jorge Rojas avanzando desde los camarines.
Con una canción romantica No saber de ti , comenzó el set melódico.
Junto a sus hermanos Lucio y Alfredo, un cuerpo de baile e invitados,mpostró una puesta de escena espectacular.
En el cierre, una selección de huaynos dio el último sacudón, antes de Marca borrada, para el delirio de una plaza con récord de concurrencia.
La coplera salteña Mariana Carrizo debía recurrir –ya sobre la medianoche– a su habitual encanto y picardía para lograr cautivar a un público enamorado por Rojas.
Luego seguirían Los 4 de Córdoba, Lucía Ceresani, Aymama y su homenaje a María Elena Walsh–, Alfredo Ábalos, Son Ellas y, en el cierre, Amboé, entre otros,para completar una noche de sábado a puro exito coscoíno.
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